www.bestiario.com/guindilla/d.php?id=143

¡HASTA EL MOÑO!. Cuando a un animal de costumbres le aniquilas la costumbre, ¿Qué te queda? Pues un animal.

Y lo reconozco, lo soy cuando pierdo mis sanas mañanas.

¡Estoy hasta los mismísimos calcetines de que la señora vecina con perro y bata, me despierte cada mañana!

Me revienta cada ladrido, también los del perro. Pero sobre todo, me exaspero sabiendo que la importa mi sueño algo así como NADA. ¡CERO!

Odio el olor a perro muerto. Y lo odio porque no lo huelo.

Me molesta un buebo que ese patrono de pulgas y pelos viva mejor que muchos niños enfermos.

La oigo hablar con el paquidermo y reconozco que son tal para cual. Lo único que me cuesta adivinar es quién de los dos tiene cerebro.

Hoy tengo mala leche. Es andar y ver una cagada... y pensar inmediatamente en que todos los días a las siete me despierta un meón, que insiste en empapar los jardines con sus babas y sus entrañas.

Y es que cuando uno duerme a sus anchas y se despierta sin jurar venganza, hasta las insoportables obras parecen mejoras escalonadas.

Hoy desde luego invitaría A TODOS a perritos calientes, con o son dientes.

[Versión para imprimir] [Enviar]

Publicado el miércoles, 24 de enero de 2007, a las 18 horas y 12 minutos








Ilustración de Toño Benavides
L M X J V S D
1 2 3
4 5 6 7 8 9 10
11 12 13 14 15 16 17
18 19 20 21 22 23 24
25 26 27 28 29 30
  
  





Bitácoras de Bestiario.com:
Afectos Sonoros | Cómo vivir sin caviar | Diario de una tigresa
El mantenido | El ojo en la nuca | Fracasar no es fácil
La cuarta fotocopia | La guindilla | La trinchera cósmica
Letras enredadas | Luces de Babilonia| Mi vida como un chino



© Bestiario.com 2004
bestiario@bestiario.com

Un proyecto de TresTristesTigres