3-0. Eufórico y aliviado, además, como madridista y raulista, intento arrimar el ascua a mi sardina: el Real Madrid ganó las últimas dos Ligas gracias a un brasileño, un par de holandeses, Casillas, Sergio Ramos, Raúl y Guti. Estos dos veteranos futbolistas, que no han jugado hoy con la selección de Aragonés, contribuyeron, como capitanes del equipo, a que el vestuario merengue fuera una piña (o un melón, mejor no nos ponemos a desentrañar tópicos futboleros). Ahora, cuando proclaman que "la roja" (que yo sepa el siglo pasado eso no se usaba) es otra sandía, parece que lo achacan a la ausencia de Raúl. No sé, si en Corea nos hubieran concedido el gol que nos impidió eliminar a Alemania en las semifinales también se habría dicho que ese vestuario era la mejor calabaza del universo.
Si Raúl y Guti hubieran chupado banquillo esta noche, también habríamos arrasado Rusia, se seguiría diciendo lo mismo... y además los raulistas estaríamos aún más alegres.
(Se puede ser forofo, o parecerlo, y disfrutar leyendo los artículos de
Javi Martínez, que juega mejor que nadie con el deporte.)