[1] La devolución. No te la roban. Te la cogen prestada y te la devuelven cuando menos te haga falta.
A mi el año pasado me la devolvieron en una sala de espera de Renfe, junto con los 10 céntimos de la Renta.
¡¡¡10 céntimos!!! Y yo aquí perdiendo el tiempo escribiendo, cuando podría estar en un crucero, dando vueltas y vueltas... Con cinco la ida, y con los otros: la vuelta y pagar a la compañia. Y no hablo precisamente de las tasas y los seguros. Me refiero A LA COMPAÑIA. Porque seamos sinceros, ya que te vas. También te quieres ir en compañia.
Retrocedo para todos aquellos que estén todavía en la M con la A: MA!. (mE VOY . meee VOOYYYY! mE ESTOYYYYY Llendooooooo) ¿Entendido? Ay! Hay que regar más a ese cerebro que está un poco seco.

O como en el cuento de la lechera, podría estar desvariando y a estas horas después de muchos devaneos, duermiendo la mona en una playa desierta - sólos mi moreno y yo -
Rectifico. Mi doble moreno. Mi moreno dorado y digno de envidia, y mi también morenazo dorado y "bai de guei" (por supuesto, voy de guai y también doy una envidia sana según quién lo diga, pero que carcome un montón)
Resumiendo: Mi moreno (al) cuadrado. Los dos, solos. ¡Qué mejor compañía!
Pero algo me dice, quizá la realidad y mi cuenta muy corriente, que no va a poder ser.
Y es que ¡manda huevos! - y mando una docena- que siempre te devuelven las cosas en el momento más inoportuno. Tres horas de retraso el jodio y paralítico tren. ¿No podrían haber sido dos? Pues no! Ahí me la metieron doblada. Y por alusiones o por asociaciones: ¿Tu crees que con 10 céntimos se puede pagar a un tio cachas en cualquier isla de lejana?
Va a ser que no! Me da la sensación que peor que el atraco, es la devolución. Fin de toda conversación.

[2] Otra semana santa que se marcha. Hace tiempo a mí también me la cogieron prestada, y después de unos años me la quisieron devolver en un bautizo.
-¡Doscientos euros! ¡Que cabrón! Yo juraría que cuando te hice el préstamo la moneda en curso era el denario.
-Es que...
-Ni es que, ni pollas. ¡Dame mis denarios!