[1] attn. srta Pedone, wherever you might be. Guaaaaaaaaaah! que pasada, no? tantos nuevos estados emotivos, revoLucionarios, guaaaah
I mean. menuda giliposhez, no?

[2] Vistas desde Hell´s kitchen. Alemania me resulta más inmóvil que nunca.
La perspectiva desde la vigésimo cuarta planta en pleno Hell´s Kitchen en el midtown neoyorquino consiste en una infinitud de rascacielos, me recordó un poco al final del Fight Club, salvando, naturalmente, las distancias.
El 301 de W53 st. en Hell´s Kitchen, el barrio que las bandas se disputan en "Gangs of New York", no está mal para dormir un par de noches sobre un colchón hinchable desplegado en el salón en casa de una amiga, pero no sé si me apetecería vivir en uno de esos apartamentos sin vistas al cielo.
Tampoco sé si volvería a celebrar mi cumpleaños en el "Tao", restaurante in de NYC recomendado por la misma amiga con música infernal, una oscuridad en la que no distingues el cuchillo del tenedor y una multitud compuesta de jovencitas ajustadísimas y maduros hombres de negocio. Un brasileño con largas rastas se paseaba, además, tocando el tambor en cada mesa. Era imposible escuchar a quien no tuvieras a un lado. Era imposible no observar el enorme buda que presidía el restaurante con una expresión tonta de felicidad. Era imposible hablar. Bastaba con concentrarte en los platos de nombres raros que tenías delante.
Menos mal que en NY hay de todo. Negros que visten levita para escuchar la misa gospel en Harlem. Garitos de jazz que mantienen la decoración de los años 40. Maravillosa exposición de fotografía de Diana Arbus en el Metropolitan. El mítico paseo alrededor del lago en el Central Park. Williamsburg o el nuevo barrio de artistas pobres en el norte de Brooklyn. Neoyorquinas que salen de las tiendas del Soho con 5 bolsas en cada mano.
Creo que todo el mundo es capaz de encontrar en NYC su cocinilla, aunque no sea la del infierno.

[3] New York, New York... Menos mal que ha reaparecido la señorita Bitervo para endulzarnos la tarde.

Viajas más, chiquilla, que la maquinilla de afeitar de Kofi Annan.

[4] Aquí te espero.... Comiendo mero.

[5] como un domingo. Soo Wong bajó vestida de su pijama blanco. Pusó agua a calentar, cuando hirvió la echó sobre el te de jazmín. Sus invitados se levantaron también y fueron hasta la panaderia llena de delicias y le trajeron croissants que chorreaban de mantequilla. Se tomaron un café y se fueron todos a pasear con Soo Wong. Pasearon entre trigales y maizales, prados y rebaños de vacas y caballos. Caminaron durante horas mirando los junquillos y las primaveras silvestres.

[6] perderse en el materialismo dialéctico. Conversaron hasta discutir, haciendo frases largas mientras se alargaban los kilómetros y por supuesto se perdieron y siguieron caminando kilometros y discutiendo. Volvieron todos a La donna del lago contentos de haberse perdidos bajo la lluvia y alegres de ponerse a preparar una sopa porque todos sabían que en realidad jugaban a los perdidos y que les gustaba discutir del materialismo dialéctico y de Kronstat en cualquier situaciones.

[7] aguardiente. Obviamente Soo Wong tenía los pies húmedos de tanto caminar, el pelo mojado. Soo Wong se resfrió, se enfermó y se cagó en el materialismo dialéctico y Kronstat desde su cama sudando con fiebre sin dialéctica ninguna. Así fue cómo Soo Wong empezó a probar aguardiente con excusa de sanarse. Así fue cómo Soo wong se emborrachó con el aguardiente de una abuela fallecida que dejó sus botellas de elixir distilado para que otras comuniacaron con ella porque los vivos y los muertos comunican con aguardiente de pueblo. Soo Wong entró en este mundo de vampiros hasta que bajó la fiebre.

[8] Los últimos. siempre serán los últimos en irse del trabajo.

[9] Tipos de letra, colores y caritas. Esas son las posibilidades que me ofrece Yahoo para adornar mis mensajes. Ya que le puedo sonreir a poca gente, o a gente a la que me trae por el culo sonreir, tengo la posibilidad de mandar, en cambio, una carita con sonrisa a aquellos que están lejos de mí o viceversa.
No quiero refunfuñar, sin más, sino quejarme de las caritas que me mandan en los correos electrónicos, de las fotos digitales que la gente hacen constantemente, como si hubiera que dejar huella de todo y no, no todo merece la pena ser recordado.
Y todas esas mandangas seudo tecnológicas y seudo modernas que nos convierten a todos en hermanos.
No y mil veces no: yo sólo me hermano con Baudelaire cuando escribe en su poema "Al lector" en las Flores del mal: "¡Hipócrita lector -mi prójimo-, mi hermano!"
Para todo lo demás, no contéis conmigo.

[10] Cómo está el patio... Entre la cogorza catarral de Hunot y la sonrisa inversa (que no vertical) de la señorita Bitervo, el agua del estanque se ha revuelto.

Pero que bien revolvida...

[11] BV, contra el mundo. A mí nunca me gustaron las fotos. Bueno, mejor dicho, nunca me gustó salir en ellas. Un día, alguién comenzó a disparar y entonces pensé que no me estaba robando el alma.

Tampoco nunca me consideré fotogénico aunque, desde aquel instante, estimo que soy ligeramente fotohigiénico.

No hace mucho me regalaron una cámara y sí, hago fotos. Fotos de pequeñas cosas, que no precisamente de cosas pequeñas.

Pero detesto, como tú, Beatriz, las caritas y las comitas y sus putas madritas.

Ahora bien, la sonrisa no puede perderse, pero tienes razón: tampoco se trata de regalarla.

Baudelaire no es gallego, pero algunos villanos tienen por capital -también- a una Carroña.

La Carroña, que diría Paco Vázquez, alcalde por los siglos...

[12] Hunot: no pare, siga, siga.

[13] Cialis Canada Pharmacy Online <a href=http://buysildenaf.com>viagra</a> Levaquin Vs Amoxicillin

[14] Buy Amoxil No Prescription <a href=http://6drugs.com>buy cialis online</a> Mtabs Cialis Gunstigster Preis Como Comprar Cialis Sin Receta What'S Better Penicillin Or Amoxicillin <a href=http://bpdrugs.com>cialis without prescription</a> Achat Generique Cialis Acheter Generique Cialis Cialis Dosis Maxima <a href=http://cialviag.com>cialis</a> Will Keflex Reduce Breastmilk Production