¿MONDO ALEGRE?. Io ricordo solo fuoco. A quel punto una pioggia di fuoco e proiettili si è abbattuta su di noi zittendo per sempre le voci divertite di pochi minuti prima.
Giuliana Sgregna,
Il Manifesto.
En Italia existe la prensa de partido, algo que no sucede aquí o en España:
L'Unità, el periódico fundado por Gramsci, le baila el agua a Democratici di Sinistra;
Liberazione, a Rifondazione Comunista;
Il Giornale (que no sería propiamente
stampa di partito, pero para el caso...), al hombre-empresa de nombre Silvio, y así.
Il Manifesto, marcadamente comunista, es un periódico humilde (económicamente hablando) y demasiado sesgado (sería, en realidad, el complemento a otro periódico, ora
La Repubblica, ora
Il Corriere, ora
La Stampa), pero interesante en ciertos aspectos: con él, por ejemplo, se distribuye
Le Monde Diplomatique (a un precio, en comparación con el Reino Unido o España, de todo a cien) y su suplemento cultural de los sábados,
Alias, es más que digno.
Para
Il Manifesto trabaja la periodista secuestrada –y ahora liberada– en Iraq, Giuliana Sgregna, que no la palmó de milagro porque el agente secreto que la acompañaba se echó encima de ella para protegerla.
Protegerla, según ella, de los disparos de las tropas estadounidenses:
“Es conocido por todos que los americanos no quieren negociaciones para la liberación de rehenes, por lo que no veo por qué debo excluir haber sido yo su objetivo”.
Los pelos, como escarpias.