DESENCUENTRO. Buscando en la minúscula pantalla Agosto negro, el vídeo de SOS contra o lume donde se critica la mala gestión del bipartito, me encuentro con una pieza homónima sobre la violencia en São Paulo.

DESDE MONELOS (Y RESPECTO A LA MANI ANTI POPULAR)... O de apoiarse nunha víctima para dar cada pasiño é unha violencia intelectual que abre a porta a outras. Lembremos por exemplo ós asasinos do GRAPO, estes tipos din que loitan polas víctimas dos accidentes laborais, segundo eles consecuencia do sistema capitalista. (É o que ten non ter viaxado pola URSS ou pola China).

Alfonso Pardo, en un comentario en si home si.

MAESTRO ANDRÉS, VA POR USTED. Finalmente, Calamaro Querido! [Cantando al Salmón] saldrá a la venta este 26 de septiembre. Merecido homenaje a Andrés, de quien Joaquín Sabina ha escrito en el librillo: Me sedujo la frescura, el talento, el desparpajo, ese modo de empezar a ser madrileño sin dejar de ser argentino. Me gustó, me inquietó, me deslumbró, casi me asustó.

Entre los dieciséis enemigos íntimos que han participado en la juntanza, se encuentran Julieta Venegas (Sin documentos), El Canto del Loco (Palabras más), Joaquín Sabina (Todavía una canción de amor), Pereza (Mi enfermedad), Diego Torres (Por mirarte), Los Fabulosos Cadillacs (La parte de adelante), Niña Pastori (No me pidas que no sea un inconsciente), Kevin Johansen (Te quiero igual), Vicentico (Para no olvidar), Javier Calamaro (Los aviones/Alfonsina y el mar), Pedro Aznar (Media verónica), Fabiana Cantilo (La libertad), Bahiano (A los ojos), Los Pericos (Flaca), León Gieco (Algún lugar encontraré) y Los Auténticos Decadentes (Cartas sin marcar).

También se pondrá a la venta una edición especial limitada en formato digipack con 25 canciones. Las nueve versiones restantes corresponden a Muchachito Bombo Infierno (Sin documentos), Fito Páez (Crímenes perfectos), Lito Nebbia (Dulce condena), Soledad (Salud, dinero y amor), Los Tipitos (Mil horas), Iván Noble (Buena suerte), Árbol (Alta suciedad), Tabaquito Marroquí (Loco por ti) y Mancha de Rolando (Me estás atrapando otra vez).

Sabina y Calamaro, juntos. Los Cadillacs, reunidos para la ocasión. Ganas de escuchar al indocumentado Jairo, de Muchachito. Etcétera.

(Sé benévolo, Manuel).

APUNTES ESCARLATA DESDE BEIJING, POR BEATRIZ VITERBO. Al salir a la calle, el suelo, todos los coches, están cubiertos por una capa de arena. En plena ciudad. El cielo (no hay cielo) es una niebla marrón. El desierto del Gobi y la región de Xinjiang nos arrastran las arenas y aquí posan su manto y se apropian del aire, y todo se vuelve marrón, sucio, irrespirable.

Tormenta de arena. Del metabaúl encarnado de BV.

EL CUENTO (CHINO) QUE QUISO SER FÁBULA (ITALIANA). Pretendía trasladar a estas páginas la cara be de la historia de Mourad Akhay, que el polémico humorista italiano Beppe Grillo narra en su blog. Cuando estoy copiando y pegando el link, me fijo que el post tiene más de dos mil comentarios. No es una excepción: cuando murió la Fallacci, alcanzó casi los tres mil. Esto me hace pensar, una vez más, sobre la sangre del pueblo italiano, tan poco coagulada y bien fluida ella.

LA FEMME. Gracias, Bob, pero ya lo sabíamos.

ACORAZADO SAMPA. Si las riegas, las verjas crecen. Las de mi edificio, además, se multiplican. Enjaulado. Entre barrotes estoy cada vez que entro y salgo a la calle. Se abre la puerta. Paso al frente. Se cierra la puerta a mis espaldas. Espero. Se abre otra puerta. Salgo. Escucho un segundo cierre. Camino.

La puerta de la garita, ahora, no es de cristal. Apenas conserva un pedazo de vídrio de ocho centímetros cuadrados. Desde más allá de la chapa de hierro, me observan cuando franqueo la verja. En la acera, una cámara: sonríe. Click.

El pobre cuida al rico. El negro sostiene el paragüas del blanco. Un parasol de varillas. Ya no vivimos bajo techo sino bajo verjas. Hombre pobre no se rebela: protege. Varios hombres negros resguardan mi edificio de la lluvia.
Unos tres millones de africanos fueron traídos a Brasil para trabajar como esclavos. En el nordeste, algunos de ellos, en cuanto tenían la oportunidad, huían selva adentro. Qué quilombo, dicen los argentinos cuando nosotros decimos qué lío. El diccionario de la Real Academia, en su tercera acepción (la primera es prostíbulo), sostiene que quilombo es un lugar apartado y de difícil acceso. Los esclavos se adentraban en la floresta y caminaban hasta que sus pies eran sangre. Buscaban refugio en lugares inaccesibles, donde no llegaba el hombre blanco. El quilombo de los Palmares fue el más grande de ellos. En ese campamento de campamentos, llegaron a vivir, a hacerse fuertes, veinte mil personas. Resistió sesenta años hasta que los bandeirantes, denominación que podría traducirse libremente como expedicionarios, lo arrasaron. Zumbi, su líder, quizás les resulte familiar.

En 1888 se produce la abolición de la esclavitud en Brasil. Los blancos de entonces son los ricos de hoy. Los negros de antes son los pobres del presente. En medio, una gama de grises, contrastados. De aquellos polvos prietos, estos turbios lodos.